Esta es la historia de un pequeño grupo de policías que medraron durante cuarenta años para mantener su poder y ganar dinero. Es la historia de cómo un grupo de políticos han cambiado la historia de España. Es la historia de la Corrupción con mayúsculas. La historia de una España inventada, siguiendo los pasos de uno de sus mayores tergiversadores, el ex comisario Pepe Villarejo.
Por sus páginas se relatan muchos de los casos más escabrosos de corrupción que afortunadamente la Justicia española está limpiando. Villarejo y sus cómplices creyeron ser más poderosos que el propio Estado, pero al final, …
Esta es la historia de un pequeño grupo de policías que medraron durante cuarenta años para mantener su poder y ganar dinero. Es la historia de cómo un grupo de políticos han cambiado la historia de España. Es la historia de la Corrupción con mayúsculas. La historia de una España inventada, siguiendo los pasos de uno de sus mayores tergiversadores, el ex comisario Pepe Villarejo.
Por sus páginas se relatan muchos de los casos más escabrosos de corrupción que afortunadamente la Justicia española está limpiando. Villarejo y sus cómplices creyeron ser más poderosos que el propio Estado, pero al final, y como en las tragedias griegas, entre tanta contienda incansable y ambición desmedida, solo queda catarsis, verdad y justicia. “La España inventada” acaba aquí. La España real es la aspiración a conseguir
Escrita por Francisco Marco, director de la agencia de Detectives Método 3, y por Manuel Bravo Pérez, periodista especializado.
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Me llamo Manuel Bravo Pérez, extremeño de Fregenal de la Sierra nacido en el verano sureño de 1983. Estudié periodismo en España y teoría de la literatura en Bélgica. Tengo el vicio incurable de la lectura gracias a que fui un estudiante sin WhatsApp. En mis vacaciones universitarias trabajaba en una taberna de carne a la brasa y en un secadero de jamones. Durante el curso me gastaba el dinero en enamorarme de Madrid. Aprendí a ser periodista en ElMundo, viajero en Amberes y superviviente en Londres. He presentado deportes y he escrito sobre política, economía y cultura. Narré la Premier League y el tenis de ATP y WTA en mi exilio británico. Escribo por enfermedad desde que era adolescente y aún creo en el periodismo del cómo frente al periodismo del cuánto. En los últimos tiempos he sido editorialista, reportero y, desde hace dos años, asesoro en temas de comunicación a grandes empresas españolas. Cuando todo se pone en contra, me refugio en el silencio que brota de la dehesa extremeña.